OPORTO -Vilanova da Gaia- (Portugal), PINHAO (Portugal), POCINHO (Portugal), VEGA DE TERRÓN (España), BARCA D´ALVA (Portugal), RÉGUA -Lamego- (Portugal), DOURO MARINA -Oporto- (Portugal)
CIUDADES, RECORRIDOS Y EXCURSIONES
Recomendamos de entre todas ellas la Iglesia de los Clérigos, la Catedral de Oporto (románica pero con detalles góticos y barrocos), la Iglesia de San Francisco, La Iglesia de San Ildefonso y la Capilla das Animas (Capilla de las Almas) pintada con 16.000 azulejos de estilo barroco en 1929.
La ciudad es dura por sus cuestas, pero maravilloso el paseo. Sus calles están muy bien conservadas, con encantadores cafés donde hacer parada y fonda, restaurantes donde degustar un buen bacalao hecho a la antigua, y con un encantador ambiente muy cosmopolita y acogedor.
Pinhao, considerada como el centro de la Región Vinícola con Denominación de Origen del Duero y donde encontramos muchas de las bodegas productoras del vino de Oporto, algunas de las cuales ofrecen alojamiento de turismo rural. Es digno de mención en esta escala, el edificio de la estación de ferrocarril, construido a finales del s.XIX, cuyo interior está revestido de paneles de azulejos azules pintados a mano.
Pinhao, considerada como el centro de la Región Vinícola con Denominación de Origen del Duero y donde encontramos muchas de las bodegas productoras del vino de Oporto, algunas de las cuales ofrecen alojamiento de turismo rural. Es digno de mención en esta escala, el edificio de la estación de ferrocarril, construido a finales del s.XIX, cuyo interior está revestido de paneles de azulejos azules pintados a mano.
Pocinho, un pequeño pueblo de la región norte de Portugal, punto de partida de la vía de tren Línea del Duero. La peculiaridad del itinerario es que los raíles y traviesas están colocados a escasos metros del río.
El Muelle de Vega de Terrón, está en la desembocadura del río Águeda, afluente del Duero. El antiguo embarcadero fronterizo se convirtió en muelle fluvial a finales del s.XIX y ha sido reconstruido a finales del s.XX. El muelle pertenece a La Fregeneda en la provincia de Salamanca y se encuentra en el lugar de mayor atractivo turístico: el Parque Natural de Arribes del Duero.
La Fregeneda era la última estación de ferrocarril antes de la frontera. El ferrocarril unía Boadilla con la portuguesa Barca d’Alva. Desde este punto, a través del núcleo ferroviario de Pocinho se llegaba hasta el Atlántico en Oporto. En la actualidad, esta vía forma parte de vía verde de las Arribes del Duero.
Excursión habitual desde Vega de Terrón es la visita a Salamanca, la gran capital cultural de la región de Castilla León, en España. famosa por su universidad, sus dos catedrales y su impactante centro histórico.
El Muelle de Vega de Terrón, está en la desembocadura del río Águeda, afluente del Duero. El antiguo embarcadero fronterizo se convirtió en muelle fluvial a finales del s.XIX y ha sido reconstruido a finales del s.XX. El muelle pertenece a La Fregeneda en la provincia de Salamanca y se encuentra en el lugar de mayor atractivo turístico: el Parque Natural de Arribes del Duero.
La Fregeneda era la última estación de ferrocarril antes de la frontera. El ferrocarril unía Boadilla con la portuguesa Barca d’Alva. Desde este punto, a través del núcleo ferroviario de Pocinho se llegaba hasta el Atlántico en Oporto. En la actualidad, esta vía forma parte de vía verde de las Arribes del Duero.
Excursión habitual desde Vega de Terrón es la visita a Salamanca, la gran capital cultural de la región de Castilla León, en España. famosa por su universidad, sus dos catedrales y su impactante centro histórico.
Barca d’Alva está en el Parque Natural del Duero Internacional con impresionantes desfiladeros sobre las orillas del Duero y el Águeda, frontera natural entre España y Portugal.
Barca d’Alva está en el Parque Natural del Duero Internacional con impresionantes desfiladeros sobre las orillas del Duero y el Águeda, frontera natural entre España y Portugal.
Pinhao, considerada como el centro de la Región Vinícola con Denominación de Origen del Duero y donde encontramos muchas de las bodegas productoras del vino de Oporto, algunas de las cuales ofrecen alojamiento de turismo rural. Es digno de mención en esta escala, el edificio de la estación de ferrocarril, construido a finales del s.XIX, cuyo interior está revestido de paneles de azulejos azules pintados a mano.
Las viñas cultivadas en bancales junto al río ofrecen bellísimas panorámicas que se pueden admirar desde los miradores como el de San Leonardo en Galafura y el de San António do Loureiro. En los alrededores, la estación termal de Caldas de Moledo, posee un embarcadero propio, y es un lugar muy agradable para unas vacaciones de reposo.
Las viñas cultivadas en bancales junto al río ofrecen bellísimas panorámicas que se pueden admirar desde los miradores como el de San Leonardo en Galafura y el de San António do Loureiro. En los alrededores, la estación termal de Caldas de Moledo, posee un embarcadero propio, y es un lugar muy agradable para unas vacaciones de reposo.
Recomendamos de entre todas ellas la Iglesia de los Clérigos, la Catedral de Oporto (románica pero con detalles góticos y barrocos), la Iglesia de San Francisco, La Iglesia de San Ildefonso y la Capilla das Animas (Capilla de las Almas) pintada con 16.000 azulejos de estilo barroco en 1929.
La ciudad es dura por sus cuestas, pero maravilloso el paseo. Sus calles están muy bien conservadas, con encantadores cafés donde hacer parada y fonda, restaurantes donde degustar un buen bacalao hecho a la antigua, y con un encantador ambiente muy cosmopolita y acogedor.
Recomendamos de entre todas ellas la Iglesia de los Clérigos, la Catedral de Oporto (románica pero con detalles góticos y barrocos), la Iglesia de San Francisco, La Iglesia de San Ildefonso y la Capilla das Animas (Capilla de las Almas) pintada con 16.000 azulejos de estilo barroco en 1929.
La ciudad es dura por sus cuestas, pero maravilloso el paseo. Sus calles están muy bien conservadas, con encantadores cafés donde hacer parada y fonda, restaurantes donde degustar un buen bacalao hecho a la antigua, y con un encantador ambiente muy cosmopolita y acogedor.
Recomendamos de entre todas ellas la Iglesia de los Clérigos, la Catedral de Oporto (románica pero con detalles góticos y barrocos), la Iglesia de San Francisco, La Iglesia de San Ildefonso y la Capilla das Animas (Capilla de las Almas) pintada con 16.000 azulejos de estilo barroco en 1929.
La ciudad es dura por sus cuestas, pero maravilloso el paseo. Sus calles están muy bien conservadas, con encantadores cafés donde hacer parada y fonda, restaurantes donde degustar un buen bacalao hecho a la antigua, y con un encantador ambiente muy cosmopolita y acogedor.
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